Desde el Comité de Pastoral del Colegio Franciscano Jiménez de Cisneros los invitamos a seguir aprendiendo con nuestra Escuela de los Gestos.
En abril abordaremos el significado del guiño y cómo este gesto en el momento, lugar y las circunstancias adecuadas, puede llevarnos a experiencias maravillosa.
Recordemos, que éste acto es sutil y puede tener muchos significados.
Hacemos un guiño para mostrar afecto, para provocar una risa, para compartir un secreto oculto y por muchas otras razones. Guiñamos en persona, en correos electrónicos y en mensajes de texto.
Algunos dicen que un guiño es solo un guiño, pero en realidad, rara vez es así, porque también puede ser divertido, bromista, coqueto y, dependiendo de quien haga (o reciba) es inquietante.
Su significado depende del contexto, del entorno y, sobre todo, de las dos personas implicadas. Se trata de una comunicación compartida.
Un guiño puede ser bienvenido o inapropiado, dependiendo de las circunstancias, el momento y la relación entre la persona que lo hace y la persona a la que se le hace.
Finalmente, no olvidemos que, también puede corresponder a un tic facial u ocular causado por el estrés, el alcohol o cualquier situación que altere nuestro cuerpo.